Restauración del molino de la Tapada


«El proceso de restauración que ha sufrido desde 2007 el Molino de la Tapada de Alcalá de Guadaíra ha finalizado, permitiendo el hallazgo de elementos que completan la historia de uno de los molinos más literarios, históricos y singulares de la ribera del Guadaíra. (…) Los pasos seguidos han sido muy parecidos a los del molino del Algarrobo. Tras la excavación necesaria se comprobó que las paredes habían resistido y se realizaron los trabajos pertinentes con las instrucciones de los arqueólogos, Enrique Domínguez y Lara Cervera Pozo para llevarlas a su estado inicial.»

«El interior del Molino de la Tapada cuenta con dos plantas; la primera de ellas servía en su tiempo como sala de molienda y la segunda, según los datos extraídos y los estudios arqueológicos, servía como almacén. A diferencia de otros molinos, caracterizados como “de ribera”, el de La Tapada se define como “molino de cubo” con un proceso diferente para la molienda, ya que a éste le llegaba el agua desde un manantial que pasaba por la llamada “fuente del piojo en la ladera de San Roque” y no desde el río como sucedía con otros molinos. Esta agua baja desde el acueducto a unos tubos y al presión que ejercía al bajar servía de energía para la molienda. El agua salía por unos conductos en dirección al río.»