El castillo, el barrio de San Miguel y el plan Urban

La pasada semana publicó El Correo de Andalucía dos informaciones sobre Alcalá y su castillo firmadas por Toñi Vargas que merecen ser reseñadas. En la primera de ellas el futuro del castillo desde un punto de vista patrimonial es explicado por la arqueóloga Lara Cervera, que también habla en la entrevista de otros elementos del patrimonio histórico de Alcalá como los molinos y Gandul. En la segunda, se expone la actuación del plan Urban sobre el barrio de San Miguel y el centro histórico desde un punto de vista socioeconómico.

–Hay una relación especial entre la población y el castillo, ¿siempre ha sido así?–Alcalá nace en época castellana. Su historia se puede leer a través del castillo, por lo menos hasta el siglo XIX. Existe una vinculación iconográfica que, a veces, no ha sido real por la dificultad de acceder a él. Ha habido momentos de desconexión, como en los siglos XVII y XVIII en que se abandona. Ahora, al igual que se ha recuperado el río es el momento de reconquistar el castillo. Es decir, la gente tiene que subir, y apropiárselo, debe utilizarlo como recurso. De hecho, puede visitarse en cualquier momento, no tiene horarios, está abierto al público. Si se quiere, se puede hacer una visita guiada el primer sábado de cada mes.

Entrevista a Lara Cervera: «Debemos reconquistar el castillo».

Una visita por las calles del barrio más antiguo de Alcalá de Guadaíra sirve para diagnosticar la difícil situación socioeconómica por la que atraviesa su gente. A medida que se asciende por la calle Arrabal se tiene la sensación de iniciar un viaje de descenso a los infiernos. A un lado del callejón queda el barranco, un improvisado vertedero de escombros, al otro, casas maltrechas, chozas que se levantan en la ladera más angosta del castillo. José Guillén, presidente de la entidad que representa a los vecinos del barrio de San Miguel, la asociación Tres Arcos, hace de guía para mostrar el extramuros, “aquí vive buena gente en malas condiciones”, se queja. Habla de la falta de contenedores, de papeleras, de iluminación.

Un viaje de las favelas al Albaicín.