Con una comunicación más que deficiente a sus clientes, la compañía eléctrica Sevillana Endesa ha decidido cambiar su oficina de atención al cliente en Alcalá. La primera noticia que reciben los usuarios del antiguo monopolio eléctrico es el cierre de la oficina situada cerca de la Casa de la Cultura, como contó Sevilla Actualidad, una decisión «sin previo aviso y sin informarse de las razones que la provocan, que ha sorprendido a los vecinos de la localidad, que a partir de ahora tendrán que desplazarse hasta Dos Hermanas o Carmona para realizar cualquier trámite o gestión con la compañía de electricidad». Un comunicado del Partido Andalucista ponía el acento en lo incomprensible de este cierre en una localidad con 75.000 habitantes. El cartel que ven en la imagen es la única información que reciben aún hoy los clientes que acuden al local.
Finalmente, la compañía ha aclarado días después que «abrirá un nuevo punto de servicio en Alcalá de Guadaíra en las próximas semanas, ya que se están llevando a cabo «a buen ritmo» los trabajos de acondicionamiento de las instalaciones para poner en marcha unas oficinas de atención comercial más modernas. Endesa explicó ayer que el nuevo establecimiento, que se prevé que esté operativo en el plazo aproximado de un mes, facilitará a los ciudadanos realizar cualquier gestión comercial relacionada con la compañía», como publica Diario de Sevilla.
Es de esperar que las críticas al anterior punto de atención al cliente sirvan a Endesa para diseñar esta nueva sede alcalareña. Por el momento, la comunicación eficaz y la coordinación para no dejar temporalmente desatendidos a sus clientes han brillado por su ausencia.